Guía definitiva para limpiar y conservar tus suelos de madera

Si has llegado a este artículo es porque tienes ciertas dudas de cómo debes limpiar tu suelo de madera y más importante aún para no dañarlo orayarlo sin querer. Hemos creado este artículo con mucho cuidado al detalle para que no te pierdas ningún paso, tanto si eres novato como experto en el tema. Te recomiendo leer en orden el siguiente índice de contenidos:

1. Herramientas y productos que necesitas

Te dejamos los materiales que necesitarás como mínimo para poder limpiar tu suelo de madera y dejarlo impecable:

• Aspiradora ó escoba: antes de ponerse a limpiar es necesario que la superficie esté limpia, con lo que necesitamos eliminar el polvo y cualquier otra partícula. Es importante que tanto la aspiradora como el cepillo tenga los pelos suaves para no rayar la madera de tu suelo.
• Paño de microfibra: estos paños son bastante económicos y remueven muy bien el polvo de la superficie sin dejar pelusas ni rayar el piso.
• Limpiador específico para madera: escoge bien el limpiador que sea para madera (incluso tu tipo de madera).
• Cubo: nos servirá para ir retirando las suciedades, así como los líquidos de agua sucia, etc.
• Escurridor: paños para escurrir y controlar la cantidad de humedad del suelo.
• Protector: al final la limpieza es muy recomemdable aplicar un protector de madera, ya que ayudará a mantener la madera hidratada en buen estado y protegida frente a agentes externos. Además alargará la vida útil de la madera de tu suelo.

Estas son las herramientas y productos mínimos que te recomendamos que tengas a mano para limpiar y cuidar tu suelo para que luzca como el primer día y perdure a lo largo de muchos años.

2. Precauciones previas según el tipo de madera

Antes de empezar a limpiar deberías saber cuál es el tipo de madera de tu suelo ya que el tratamiento de limpieza a aplicar según el tipo de madera varía un poco. Te dejamos los siguientes tipos de madera para que tengas en cuenta algunas indicaciones previas y además te ayude a identificar tu suelo de madera en caso que no sepas cuál es, ya que este artículo es tanto para novatos como para expertos.

• Madera maciza: este tipo es el de madera pura. Es más susceptible a cambios de humedad y temperatura. Si este es tu suelo haz que el contacto con el agua sea el más mínimo posible. Si se te derrama algún líquido, sécalo inmediatamente.
• Madera de ingeniería: es muy parecido a la anterior, aunque un poco más resistente al agua. Aún así sigue usando un paño húmedo, en lugar de mojado.
• Laminados: los suelos laminados de madera, también se les conoce como madera de imitación, ya que no es madera realmente, si no una reproducción visual sobre un núcelo de fibra. Son más resistentes al agua y a las manchas. Sin embargo también son vulnerables al agua ya que puede quedarse estancada. Aquí evita usar productos pulidores o cera ya que dejan una película opaca.

3. Qué No hacer y qué productos No usar

En algunas ocasiones es importantes saber qué acciones no debes realizar o qué producto no debes usar. Por ejemplo pensamos que el alcohol lo puede limpiar todo, pero no, es un error muy grave y quizás de novato. Es importante ser precavido para no dañar el precioso suelo de madera que tienes, ya que usar un producto inadecuado puede dejar irreversible tu suelo de madera. Veamos algunas prácticas a evitar y productos que no debemos usar:

3. 1. Prácticas a evitar

• No usar mucha agua: el agua y la madera no son buenos amigos. De vez en cuando está bien una limpieza húmeda, pero nunca empapar el suelo con agua. Escurre bien el paño antes de usarlo.
• Evitar la limpieza a vapor: las máquinas de limpieza con vapor pueden meter humedad en las griteas y uniones del suelo, lo que a medio plazo hará que se produzca hinchazón y deformación.
• No usar cera o pulidores: éstos pueden dejar una película pegajosa y opaca, haciendo que sea más difícil las futuras limpiezas. Solo úsalos en los casos que tu suelo sea de madera encerada.

3. 2. Productos prohibidos

• Amoniaco: un producto muy agresivo que puede dañar el acabado, haciendo que la madera pierda su precioso aspecto, dejándolo más apagado y opaco.
• Lejía: un producto de limpieza genérico pero que puede hacer que la madera pierda su color y au acabado.
• Productos abrasivos: un poco obvio, pero importante señalar. No usar cualquier producto con agente abrasivo que rayaría y dañaría la superficie.
• Aceites: un producto que atrapa el polvo y la suciedad, pero que deja una película resbaladiza haciendo que el suelo parezca sucio y descuidado.

Aunque poca gente lo hace, te recomiendo leer las instrucciones de cada producto y usarlo a modo de prueba antes de limpiar, para ver su efecto.

4. Pasos para dejar limpio y brillante tu suelo de madera

Aquí por fin te dejo los pasos a seguir para limpiar tu suelo. Intenta seguirlo en perfecto orden:

4.1. Eliminación del polvo y las partículas sueltas

El primer paso es limpiar bien la superficie del suelo. Para eliminar el polvo sin dañar el suelo usar una aspiradora o un cepillo, pero con las cerdas suaves. Aspira o barre la superficie y déjala bien limpia. Luego coge el paño de microfibra y así recogerás algunas partículas que están más adheridas al suelo.

4.2. Solución de limpieza

Coge el mezclador específico de madera que tengas o hayas comprado y mézclalo con agua, con la cantidad que te diga el fabricante en la pegatina. Si no tienes un mezclador de éstos, usa agua con jabón neutro. El agua debe estar tibia, y nunca caliente.

4.3. Aplicar la limpieza húmeda y secado

Ahora sí, con otro paño de microfibra (intenta no usar el que usaste al principio) empápalo y luego escúrrelo bien en el cubo. Pásalo en tu suelo, en la orientación y dirección de las vetas de la madera. Hazlo por zonas para posteriormente enseguida secar esa parte del suelo donde acabas de aplicar el paño húmedo. Revisa al terminar que no haya quedado ninguna parte con agua o exceso de humedad. Para el secado usa otro paño de microfibra.

4.4. Brillado

Si quieres que tu suelo quede brillante puedes adoptar una solución de producto restaurador o acondicionador para suelos de madera. Recuerda seguir las indicaciones del fabricante. Cuando lo apliques hazlo con un paño limio y movimientos circulares y suaves.

5. Mantenimiento posterior

Si quieres mantener la vida y apariencia atractiva de tu suelo, te recomendamos un mantenimiento posterior a seguir, según los pasos que te dejamos a continuación:

5.1. Limpieza rutinaria

Con simplemente barrer el suelo regularmente, consigues que tu suelo de madera se pueda rayar. Recuerda usar el cepillo suave. Si se te cae algún líquido, sécalo inmediatamente para evitar daños.

5.2. Evita la exposición al Sol

La luz del Sol a largo plazo daña la madera y le quita su bonito color. Intenta usar alguna cortina o persiana en esas horas donde el Sol pueda dar luz directamente a tu suelo.

5.3. Protector en muebles

Usa protectores en las patas de los muebles y sillas para evitar rayones y marcas. Asegúrate de que estos protectores estén siempre en buen estado.

5.4. Mantenimiento de la humedad

Usa humificadores (de verano e invierno) para mantener el nivel de humedad adecuado en tu hogar que afecta indirectamente a tu suelo. Intenta que el porcentaje de humedad sea entre e 40% y el 60%.

5.5. Evitar arrastrar muebles

Si necesitas mover algún mueble, siempre es mejor levantarlo que arrastrarlo, porque rayará directamente tu suelo. Ojo con la espalda si los muebles son pesados, busca alguien que te ayude o flexionar bien las piernas antes de coger el mueble en peso.

6. Errores comunes

• Uso excesivo de agua
• Elegir productos inadecuados
• Aplicación de ceras en suelos no encerados
• Ignorar las recomendaciones del fabricante
• Utilizar herramientas abrasivas
• No proteger el suelo durante la limpieza
• Limpieza a vapor en suelos no aptos
• Dejar derrames sin limpiar
• No reajustar regularmente los protectores de muebles
• Saltarse el proceso de eliminación de polvo

Y para acabar decir que sería ideal revisar más profundamente tu suelo una vez al año. Identificar desgaste, rayones o quizás alguna parte que necesite ser reemplazada. Esperamos que este artículo te haya servido de gran ayuda y deseamos que tu suelo quede limpio y brillante como el primer día ¡Como los chorros del oro!